Cada rincón de La Gomera tiene su magia y al este de la isla te sorprenderá un remanso de paz de poco menos de cincuenta habitantes, Chejelipes. El paisaje de este enclave gomero se caracteriza por las tres presas alrededor de las cuales se sitúan amplias zonas de cultivo y palmerales. Perteneciente al municipio de San Sebastián de La Gomera, sobre las laderas del barranco de La Villa se asientan las casas de este caserío aislado, aunque de fácil acceso.

El terreno escarpado de la zona hace que, en ocasiones, sea necesario el uso de montacargas para poder transportar los víveres a los vecinos y salvar así la accidentada geografía del barranco. Las tres presas características de Chejelipes sirven también como atractivo y desde sus muros transitables se pueden apreciar magníficas vistas del caserío. Esto las convierte en miradores únicos desde donde captar las mejores instantáneas.   

¿Cómo llegar a Chejelipes?

Como comentábamos, Chejelipes está situado al este de La Gomera, cerca de la capital de la isla. Desde el propio casco urbano de San Sebastián se puede llegar en coche tras un trayecto de aproximadamente 20 minutos. Una vez en el caserío de Chejelipes, si se quiere visitar el embalse de La Laja, habrá que seguir por una carretera secundaria otros 5 kilómetros aproximadamente.

Lugares con encanto de La Gomera

Además de Chejelipes, en nuestra isla puedes encontrar muchos otros lugares pintorescos que no dejan indiferente a nadie. En la zona norte, en pleno Parque Nacional de Garajonay está otro caserío característico, el del Cedro. Este espacio rural, rodeado de exuberante naturaleza, refleja un verdadero caserío de montaña con casas de corte tradicional, bajas y con puertas y ventanas de madera. El bosque en el que se encuadra, con millones de años de antigüedad, todavía lo hace más especial. Si lo visitas no te olvides de probar el potaje de berros, uno de los platos tradicionales de La Gomera y famoso en este lugar.  

La magia de nuestra isla te espera para que vengas a descubrirla, ¿te atreves?