Te has preguntado alguna vez… al hacer la compra ¿cuál es la historia de ese alimento? ¿en qué condiciones se cultivó, de dónde viene o cuantos kilómetros ha recorrido para llegar hasta tu mesa?

El consumo de productos locales, forma parte de un movimiento más amplio “el movimiento sostenible” que busca una relación armónica entre la sociedad y la naturaleza. Conservar y proteger el medio ambiente de forma responsable sin poner en peligro nuestros recursos ni los de las generaciones futuras.

En los últimos años ha cobrado auge un movimiento social que promueve “lo local” “lo más natural”, sin pesticidas, plaguicidas, conservantes, colorantes, derivados del petróleo, sin hormonas…sin ingredientes artificiales.

Cada vez más, son más las personas que leen con detalle las etiquetas y se interesan por su origen y sus componentes, buscando productos y alimentos que no dañen el medio ambiente ni contengan ingredientes que puedan mermar su salud. 

Te animamos a que, no sólo acudas el supermercado para hacer tus compras, sino que visites también los mercados de agricultores, o las fincas, y preguntes sobre como se ha cultivado el alimento, que propiedades tiene, cómo puedes cocinarlo…para los niños y no tan niños, puede ser emocionante ver cómo crecen los alimentos, conocer su entorno y poder estrechar el vínculo entre nosotros, consumidores y los cultivadores.

Existen muchos motivos por los que te aconsejamos consumir productos locales, estos son algunos de ellos:

  1. Te puedes dar el lujo de comer algo realmente fresco, con más sabor y con mayor cantidad de nutrientes, ya que el alimento ha completado su maduración en la planta y ha sido recolectado pocos días antes de ser comprado. En cambio, los productos, que, para llegar a tu mesa, han de recorrer grandes distancias, no suelen recolectarse en su momento óptimo de maduración y permanecen durante semanas en cámaras frigoríficas hasta llegar a su destino, perdiendo gran parte de sus nutrientes.

 

  1. Al comprar productos cultivados en áreas cercanas, contribuyes a reducir la emisión de gases contaminantes, ya que evitarás el transporte desde lugares lejanos que provocan elevadas emisiones de CO2, contribuyendo al cambio climático.

 

  1. Ayudarás a los pequeños productores y agricultores locales a prosperar y sobrevivir y ello redundará en la economía local. Comprando productos locales, estarás apoyando el desarrollo sostenible, ya que los ingresos que perciben los agricultores los animan a continuar cultivando sus tierras, permaneciendo en ellas y creándose empleo sostenible alrededor de éstas.

 

  1. Contribuirás a conservar el paisaje y a mantener la biodiversidad local, ya que la agricultura local y la ecológica, promueven la conservación y respeto de las variedades autóctonas, siendo los pequeños agricultores, los que mantiene vivas  algunas variedades de frutas y verduras que difícilmente encontrarás en un supermercado. Comer productos locales, por tanto, es comer variado, y una dieta variada es lo mejor para la salud.

 

  1. Conocer y valorar las variedades de fruta y verdura de cada zona favorece la gastronomía regional y la convierte en un activo cultural diferenciador y único.

 

  1. Al consumir productos locales, comerás automáticamente lo mejor de cada temporada, conocidos popularmente como “productos de temporada”. No olvides que hay muchos alimentos que no se pueden cultivar durante todo el año. Ten en cuenta al comprar cuando es el mejor momento para consumir cada producto.

 

  1. Los productos locales tardan más en estropearse, ya que al haberse cosechado cerca de tu casa están recién recolectados y no han necesitado ningún producto para conservarlos.

 

  1. Reducirás el uso de embalajes, ya que muchos productos frescos no están envasados, llevando tu carrito de la compra o tus bolsas de tela desde casa. Ten cuidado con los grandes embalajes que nos ofrecen los supermercados y que muchas veces sobrepasan nuestras necesidades…terminando los alimentos en el cubo de la basura.

La Gomera es un conjunto fascinante de diversidad de ecosistemas, proclamada Reserva Mundial de la Biosfera en 2012. El hotel Jardín Tecina está plenamente integrado en la naturaleza de esta bella isla y nos hemos sumado al movimiento sostenible con nuestro proyecto de finca ecológica Eco Finca Tecina, basado en los principios de la permacultura, un diseño agrícola basado en los patrones y las características del ecosistema natural.

La práctica del cultivo ecológico a través de una finca hortícola nos ayuda a mantener e incluso a aumentar la fertilidad de la tierra. Además de obtener plantas sanas y vigorosas, conseguimos espacios llenos de biodiversidad, armoniosos, agradables, que nos abastecen diariamente de alimentos locales, frescos y saludables, de excelente calidad nutricional y buen sabor.

En definitiva, te animamos a que lleves a cabo un consumo sostenible y racional, pensando siempre en la calidad y la cantidad de los productos que realmente necesitamos para nuestra vida diaria.